DIABETES - 4 de junio de 2022
Dependiendo de las personas, puede variar el cómo y el cuándo se administra la insulina. Además, el tiempo es importante en este punto, y la forma de administrar la insulina puede cambiar a lo largo del mismo.
El estilo de vida, la alimentación, los niveles de azúcar en la sangre… son factores que harán que las personas puedan administrarse tan solo un tipo o varios tipos diferentes de insulina a lo largo de un día.
En este sentido, nos encontramos diferentes tipos de insulina:
Teniendo en cuenta los diferentes tipos de insulina, también es importante destacar que existen formas diferentes de administrarla:
La Bomba de Insulina: consiste en un pequeño dispositivo del tamaño de un teléfono móvil que administra insulina de forma continuada. Consta principalmente de dos partes: el infusor de insulina, y el catéter de conexión. Lo que se persigue con este tratamiento es imitar el funcionamiento del páncreas de una persona sin diabetes. Esta terapia es considerada la más fisiológica ya que infunde insulina continuamente. La cantidad de insulina que se va a administrar está programada previamente por el equipo médico basándose en los controles de glucemia. Además, el difusor va a permitir suministrar una cantidad mayor de insulina cada vez que comemos.
Las jeringas o plumas serían otra forma de administrar la insulina. Estos utensilios administran la insulina a través de una aguja.
El inhalador de insulina consiste en un aparato que, como indica su nombre, suministra la insulina de forma inhalada. Esta insulina viene en una presentación en polvo en un cartucho pequeño que se coloca en el propio inhalador y se administra directamente a los pulmones. Conocida como administración pulmonar de insulina, la insulina inhalada pasa a través de las células del revestimiento de los pulmones donde se vasculariza rápidamente, lo que significa que entra en el torrente sanguíneo.
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